LA COLUMNA DEL VINO®AÑO XXII – NUMERO 1
(Tiempo de lectura: Aprox. 5 minutos)
(01.01.22)
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Hola queridos Wine Lovers:
¡ MUY FELIZ AÑO NUEVO !
Espero que todos hayan pasado un muy buen fin de año, sin problemas, con buenos vinos y espumosos y, más aún, junto a sus seres queridos.
También espero -y así lo deseo- que tengan un magnífico 2022, lo que significa que:
§ La pandemia desaparezca y no afecte más a la salud y a la vida -en general- o -cuando menos- que pase a ser una enfermedad más y no un terrible flagelo que coarta actividades, crecimiento y placeres, y por otro lado corta vidas.
§ La situación económica mejore para todos.
§ Todos puedan realizar sus actividades libremente y sin restricciones.
§ El vino siga siendo un motivo de reunión.
§ Y que todos puedan concretar sus proyectos, seguramente algo demorados.
LA COLUMNA DEL VINO CUMPLE 22 AÑOS
Este año La Columna del Vino cumple 22 años ininterrumpidos y bastante intensos. Como dije la semana pasada ya produje más de 1000 newsletters.
Muchos me sugieren volcarme a las redes, lo voy haciendo de a poco y este año trataré de inclinarme hacia ese lado. Otros me sugieren iniciar un programa de radio y ciertamente mi profesión y mi carácter me brindan la posibilidad de expresarme bien y -en general- con claridad, de manera que podría ser interesante esa opción para seguir divulgando este maravilloso mundo del vino; pero nunca lo he pensado, ya veremos. Por otro lado, también me dicen que debo realizar más eventos (como hice muchos). Pero estos tiempos no han sido ideales para reuniones, de todas formas alguno haré, con la ayuda de algunas bodegas.
Pero lo más importante, que también surge de mi formación, mi profesión y de mi manera de ser, es el placer de escribir … mis newsletter, libros (ya he escrito tres y estoy sobre la meta del cuarto), artículos de todo tipo (escribí muchos de Derecho, algunos de buceo y otros de temas generales, además de los relacionados con el vino)
De manera que -por ahora- La Columna del Vino seguirá, quizás tratando de ser más breve, de manera que su lectura sea rápida ya que los tiempos actuales exigen prontitud (además de inmediatez que es lo que dan las redes).
De todas formas, trataré que esta actividad que tanto me gusta, les siga gustando a ustedes también.
VINOS
Como fin de la Nochebuena, acompañando las riquísimas cerezas de la Bodega Familia Schroeder, abrí -para el brindis- un Rosa de los Vientos Rosé Nature de Pinot Noir que elabora desde sus comienzos la misma firma, de la mano de su enólogo Leonardo Puppato que se encuentra a cargo de la enología desde los inicios del empren
dimiento, a principios de la década pasada.
Merece recordarse, que dicha bodega, que tuve el gusto de visitar hace unos años, se ha destacado en la producción de vinos con uvas pinot noir y también de espumosos, en gran medida compuestos por vinos base de esa cepa. Lo notable es que tiene diez etiquetas de pinor noir, entre tranquilos y espumosos, que se hacen con uvas de viñedos propios sitos en San Patricio del Chañar (140 hectáreas de viñedos, 30 de esta cepa), Neuquén.
En este caso es un espumante de pinot noir (método charmat), que pasa por una maceración de 24 horas para obtener un suave color rosado y luego de la vinificación y la toma de espuma, permanece seis meses en contacto con sus lías obteniendo burbujas finas y persistentes, con notas frutales y delicados aromas de levaduras.
Con su ya tradicional y elegante etiqueta, en la copa se exhibe con un color rosa medianamente pálido, con un tono asalmonado. En nariz brinda aromas a frutas rojas y negras y dejos de levaduras. En boca es muy fresco debido a su muy buena acidez (pH 3.15), seco, pero frutado, buen cuerpo (12,5º) y muy agradable hasta su recuerdo, persistente y cautivante.
El precio sugerido a vinotecas es de $ 1.350 y, como todos los vinos de la bodega se consiguen en su Tienda Online: https://tienda.familiaschroeder.com/
En estos días probé, después de mucho tiempo el Gouguenheim, Malbec Reserva Cosecha 2018, de la bodega homónima y que he probado en algunas degustaciones o exposiciones y que siempre me dejó muy buena impresión.Se trata de un firma que nació en 2002, de la mano de Patricio Gouguenheim (hijo de padres franceses), quien encontró una bodega antigua en Tupungato, con un sistema de riego muy bueno y con gran cantidad de pequeños tanques de hormigón, perfectos para elaborar vinos de alta calidad, por lo que dejó su carrera en finanzas para convertirse en productor de vino y comenzar con su bodega familiar.Lamentablemente se lo ve poco en vinotecas y nunca en supermercados, al punto que lo encontré en una buena vinoteca de San Antonio de Areco (Aprox. $ 800/900).El vino se elabora con uvas del Valle de Uco y con una crianza en barricas de roble de primero y segundo uso, durante ocho meses. Tiene una presentación sobria y elegante y se exhibe en la copa con un color rojo violáceo muy intenso y oscuro. En nariz brinda aromas a frutos rojos, típicos de la cepa, como ciruela, cereza y frambuesa, con un dejo de violetas, además de notas de chocolate y café debido a la crianza. En boca tiene un ataque muy amable, y luego sigue con sensación de corpulencia pese a una moderado tenor alcohólico, y se hace sentir suave por una acidez también moderada (pH3.8), y taninos dulzones, todo lo cual lo lleva a ser un vino agradable, complejo y equilibrado. Excelente.
Dos productos de Bodegas López han llamado mi atención:
Por un lado el Federico López, Gran Jerez, que es un blend de cosechas ya que, como lo dice su etiqueta, fue añejado en soleras de roble, cuyo procedimiento es precisamente ir pasando de una a otra parte de la añada anterior. Ello marca todo un proceso especial que comienza con la maduración o sobremaduración de las uvas que debido a su mayor contenido proporcional de azúcar darán un mayor grado de alcohol. Luego de la fermentación se pasa el producto a criaderas o soleras que no se completan para que se forme el “velo de flor” que es una capa de levaduras que cumple la función de evitar la oxidación y de agregar ciertas notas organolépticas especiales a este tipo de vino. Finalmente, cabe decir, que se va pasando parte del vio a la solera inferior y así sucesivamente: A la primera se le restituye la cantidad con vino “nuevo”, a la segunda con el de la primera ya la tercera con el de la segunda (si hubiera más se sigue de esta forma). El vino definitivo se toma de la última.
En este proceso el Jerez, que tiene su origen haca más de 200 en la zona sudoeste de España (Jerez de la Frontera), que se hace -de acuerdo a ciertas regulaciones de origen- con uvas palomino, pedro ximénez y moscatel y brinda sensaciones especiales, distintas a los vinos habituales, que le dan un tono de aperitivo ligero (entre 15º y 17º), que se toma sólo y preferentemente fresco, es suave, moderadamente seco y muy apreciado en todo el mundo.
En el caso, más allá de su nueva etiqueta, seria pero llamativa, debo señalar que se elabora con cepas originarias de la zona aludida, tiene un color amarillo medianamente intenso. Ofrece aromas a frutas secas, higos, pasas de uva y vainilla. En boca es amable en su entrada y corre por el paladar suavemente seco, pero agradable y con buena estructura (15,3ª), para llegar a un final frutado, agradable y sabroso. Excelente.
Tiene el estilo del “Fino” como se dice en España y no del “Oloroso”, que suele ser más fortificado (con más alcohol). Es para no dejarlo pasar.
El otro producto es el AceIte de Oliva López de la cepa Frantoio, que he usado éstos días para condimentas ensaladas, boconccinos, sorrentinos y otros alimentos a los que le va muy bien al aceite de oliva.
Merece destacarse que desde hace casi un siglo, la firma plantó distintas variedades de olivos como Frantoio, Arbequina, Manzanilla, Farga, Nevadillo y Empeltre, en varias de sus fincas.
Elaboran sus “aceites” con el método clásico de primera presión en frío, que mantiene intactas sus propiedades originales, luego pasa al lavado, centrifugado y filtrado, para lograr un excelente producto, armonioso, con un suave amargor, con ligero picor, baja acidez y notas frutadas y herbáceas. Excelente.
En éstos días probé el Tucumen Reserva Malbec 2019, de la Bodega Budeguer, que es de propiedad de la Familia Budeguer, formada por Juan José Budeguer, su esposa Celia y sus tres hijos, Este grupo familiar es oriundo del norte, donde tiene varios emprendimientos agroindustriales y en 2005 comenzó con la actividad vitivinícola. Tuve oportunidad de conocer a uno de sus hijos y de probar varios de sus vinos. Hace un tiempo comenté un Zinfandel 2016, de la misma línea que el que ahora comento y que estaba muy bueno.
En este caso, tiene una presentación muy colorida, destacando la marca y la cepa. En la copa se lo ve con un color rojo oscuro y violáceo intenso y en nariz ofrece aromas a frutas rojas típicas e la cepa, medianamente maduras, como ciruela, cereza y frambuesa, además de notas de violetas y dejos de vainilla y chocolate, producto de su contacto con madera. En boca tiene un ataque amable, y luego corre con buena estructura y concentración pero muy agradable y con taninos presentes pero algo redondeados que, sumados a su buena acidez lo tornan un vino muy agradable, hasta su recuerdo largo y sabroso. Muy, pero muy bueno (Aprox $ 500, en supermercado oriental).
NEWS
En una nota de Fabrizio Pizzolatto, del 17 de diciembre pasado, Philippe Caraguel, Director de la Bodega Atamisque, sobre la que les he hablado varias veces y sobre cuyos vinos siempre he tenido concepto elogiosos, dijo algunas cosas que aquí rescato:
Nosotros hemos tenido un perfil que se ha mantenido constante y consideramos que ha sido muy acertado tanto en el mercado interno como en la exportación. Siempre nos valoraron por la elegancia, la intensidad de los vinos y el respeto de los perfiles varietales …
El consumidor es cada vez más exigente, más inquieto. Desea buscar nuevas alternativas. Eso es un cambio muy valioso porque de a poco se va perdiendo el temor a cambiar marcas tradicionales. En esa búsqueda, lo que ofrece Argentina no lo ofrece ningún país en el mundo: buenos vinos con una oferta de precios imbatibles. Hay calidad en todos los segmentos de precios como en ningún país del mundo …
La calidad es un bien ganado y una condición necesaria. Y también tiene que ver una comunicación que sea convincente para que el consumidor se desprenda de elitismos y mensajes soberbios, en los que se induce que para tomar vinos hay que saber. En realidad para tomar un vino hay que tener ganas.
(www.guarda14.com/noticias/philippe-caraguel).
Posicionada como la segunda bodega más vendida del mercado argentino, Nieto Senetiner celebra el aniversario N° 20 de su línea Don Nicanor y reafirma una trayectoria que nació con la Bodega en 1888, sita en Vistalba, Luján de Cuyo, logrando mantenerse vigente y llegar, año tras año, a todos los consumidores argentinos, con excelencia e innovaciones. Don Nicanor Nieto nació en 1907 en Salamanca, España, en una familia de agricultores y llegó a Mendoza a los 18 años con su hermano Vicente. Contrajo matrimonio con Isabel Carbó, con quien tuvo tres hijas: Susana, Rosa y Beatriz. Rosa Nieto, su segunda hija, se casó con Adriano Senetiner.
En 1942 Don Nicanor creó un establecimiento de conservas alimenticias y en 1969, junto a su yerno, se iniciaron en vitivinicultura conformando una sociedad denominada Nieto Carbó y A. Senetiner A.C.I. y comprando una bodega en Carrodilla, Luján de Cuyo. Su primera cosecha fue en 1973 y fue una de las primeras bodegas en obtener premios internacionales: en 1976 con un Gold Medal en Milán (Italia), un nuevo Gold Medal en 1978 en México y así la saga continuó hasta nuestros días.
Con el Don Nicanor Single Vineyard Malbec 2016 (y toda la línea de los vinos Don Nicanor), se rinde homenaje a su fundador (fallecido en 1987). Este es un vino profundo y complejo de lotes de barricas especialmente seleccionadas de los viñedos del Valle de Uco. He tomado algunos de sus antecesores y fueron realmente espléndidos.
Con su abanico de vinos de gran complejidad, elegancia, equilibrio y pureza varietal, esta empresa entendido los rumbos del consumo, dando respuesta a las necesidades y motivaciones de los consumidores. Eso la erige en una de las bodegas más importantes del país.
Uno de los críticos más importantes del mundo del vino, James Suckling, dio a conocer su los Top 100 Wines 2021 de la Argentina dejando en primer lugar al Trapiche Iscay Malbec Cabernet Franc 2017.
Se trata de un vino con historia, ya que los primeros –si no me equivoco- fueron elaborados con el malbec propuestao por Don Angel Mendoza y el Merlot elegido por Michel Rolland, pasando por distintos tipos de cortes e intervinientes, como Daniel Pi, y Sergio Case.
Es un corte 67% Malbec de Gualtallary con 33% de Cabernet Franc del Valle de Uco, con dieciocho meses de crianza en roble francés, y según me cuentan el Malbec brinda su color rojo púrpura intenso, aromas a violetas, frutos rojos maduros, un toque de especias y taninos generosos. El Cabernet Franc aporta fruta negra, un dejo balsámico y taninos que le dan estructura. Una combinación que da como resultado un vino sabroso, de gran concentración, elegancia y complejidad (Precio Sugerido $ 7.500)
Van mis felicitaciones a Daniel Pi, Marcelo Belmonte y Sergio Case, que seguramente son “los padres” de la criatura.
La Bodega Trivento, que inició sus actividades en 1996, informa que su vino emblema el Trivento Reserve Malbec se ha convertido según la Consultora Nielsen, en el vino más vendido en el marcado del Reino Unido, por un valor superior 72 millones de libras.
A su vez señala que en el Reino Unido ha crecido su venta (+ 22% en valor) y su penetración en hogares (+ 7,2%). Además, ese vino el millón de cajas de 9 litros vendidas globalmente en 2020 y espera culminar este año con más de 1,5 millones de cajas.
Casir dos Santos, es una bodega mendocina, de Maipú, que cuenta con fincas propias en Lulunta, Agrelo y en el Valle de Uco en Gualtallary, San Carlos y Vistaflores. Su edificio fue construido en 1862 y es considerada una de las bodegas en funcionamiento más antiguas de Mendoza. Tras una importante modernización comercializa tres líneas de vinos: Casir dos Santos, que son los íconos provenientes de las mejores regiones del Valle de Uco y Alto Agrelo; Viña Antigua, la línea intermedia compuesta por vinos provenientes de fincas de más de 100 años en Lunlunta; y Avatar, la línea de vinos jóvenes provenientes de Agrelo.
Recientemente designó como su nueva Gerente General y Chief Winemaker, de la bodega a Julia Halupczok a quien conocí en una reunión de Finca Sophenia. Tiene más de 15 años elaborando vinos de alta gama y es una de las enólogas más reconocidas en la Industria del Vino. Hasta el momento, se desempeñaba en Finca Sophenia y, previamente trabajó en Bodega Alta Vista como enóloga a cargo; donde conoció a Didier Debono, quien fue asesor enológico de Casir dos Santos durante 10 años; de esta manera continúa el camino de su mentor. Además, fue segunda enóloga de Bodegas y Viñedos O. Fournier durante 4 años.
CORREO DE LECTORES
Una lectora de muchos años apuntó, con cierta crítica:
Alejo: Me encantó Jeremy Renner, en las dos zagas de Misión imposible, pero me pareció muy duro en Zona de Miedo y en La leyenda de Bourne y ni hablar de los comerciales de los superhéroes. Pero es un hombre interesante …
Cierto, no tiene el histrionismo natural de Gary Grant, Gregory Peck, Lino Ventura, Jean Paul Belmondo. Alberto Sordi, Vittoro Gassman y muchos otros; pero seguramente -con el tiempo- ganará “oficio”, como pasó con, Alain Delón, Paul Newman, Clint Eastwood, Lee Marvin y muchos otros.
Los restantes correos de la semana fueron esencialmente saludos de fin de año, por lo que les digo otra vez …
¡¡¡ MUCHAS GRACIAS !!!
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La semana próxima irá el tradicional recuento de corchos del año 2021
Mientras tanto les deseo un FELIZ AÑO NUEVO
ALEJO
“El Añejo”
