AÑO XX - NUMERO 18

(01.05.2020)

 

 

Hola queridos Wine Lovers:

 

  

 

 

PETER CETERA

 

 

   

 

Peter Paul Cetera (Chicago, Illinois, 1944), es un cantante, compositor, bajista y productor. Muy atractivo por su talla, sus ojos claros y su cabello rubio. Fue conocido por ser un miembro original de la banda “Chicago”. Pero desde que abandonó el grupo, ha logrado muchos éxitos, entre ellos dos de sus sencillos que alcanzaron la máxima posición de la lista Billboard Hot 100. Entre sus temas más exitosos se encuentran los que recomiendo que vean y escuchen:

After All                         https://youtu.be/-0AsJK2tcKc

If You Leave Me Now  https://youtu.be/dp1sNnJv_zc

Hard to Say I'm Sorry  https://youtu.be/HN9pMgtoy7o

The Next Time I Fall     https://youtu.be/D__fuROzjGc 

   

 

VINOS

 

 

La semana pasada tomé el DiamAndina Malbec, Cosecha 2017, que es un vino que elabora la Bodega DiamAndes de propiedad de la Familia Bonnie, que se encuentra en el Grupo Clos de los Siete y que tuve el gusto de visitar hace un par de años. El enólogo es Ramiro Balliro y Michel Rolland el wine consultant.
El vino, que es un malbec típico del Valle de Uco, está elaborado con uvas de viñedos propios (poseen 130 Has.), situados en el predio del Grupo antes mencionado a unos 1100 metros de altura y a razón de 55 piés por Ha.
Tiene una presentación ya clásica de la línea con las rayas horizontales, en este caso azul oscuro, casi negro. El  proceso de vinificación es realizado por gravedad y se utilizan tanques de acero inoxidable termo regulados, aislados con doble pared.
Tiene un color rojo oscuro y profundo, con tonos violáceos, y en nariz ofrece aromas a frutas rojas maduras. En boca tiene un  ataque amable y corre con buen cuerpo (14°) y volumen, pero con cierta frescura que, sumada a sus taninos, presentes pero suaves, lo torna muy redondo y agradable, para terminar con  un recuerdo sabroso y persistente.
Excelente vino en su gama (Aprox. $ 550/560).  

 

 

Uno de los que no falla es el Laureano Gómez, Reserva Malbec, Cosecha 2017 (Tetris, por la etiqueta), de cuyos antecesores ya les he hablado.
Laureano, a quien conocí en oportunidad de mi visita a la entonces Bodega Antucura, porque él estaba embotellando sus vinos allí (luego lo vi varias veces en diversos eventos), se desempeñó durante más de veinte años, como enólogo en dos importante bodegas mendocinas (Trapiche y Salentein). Luego comenzó con una producción familiar de vinos, en su bodega boutique de Tunuyán, Mendoza, que en sus inicios se llamó BODEGA GARAGE, ya que en ese espacio comenzaron la elaboración de las primeras cuatro cosechas. Hoy producen casi 100.000 botellas y todos sus vinos son muy buenos.

Sobre este vino dije, en el Número 5 de este año:  

En el caso en un 100% Malbec de Valle de Uco que tiene una presentación sobria pero que en la copa se destaca su color rojo intenso y oscuro con tonos violáceos casi negros. En nariz ofrece aromas a frutas rojas maduras y notas de vainilla y chocolate debido a que parte del vino pasa por barricas de roble francés durante doce meses. En boca tiene un ataque dulzón y amable, muy buen cuerpo (14.9°), como siempre le gustó a Laureano y taninos redondos que lo hacen muy agradable; para terminar con un buen recuerdo, sabroso y de varias caudalías. Si bien es un vino muy, pero muy bueno, lo cierto es que a $ 280 (en el supermercado oriental), brinda una excelente relación precio calidad (la imagen es de una cosecha anterior).

A mi hija y a mi esposa les gusta mucho, por eso compraron en el supermercado oriental “de cercanía” (como se dice ahora), un par de botellas, claro que a $ 395 (41 % más caro), lo cual sigue arrojando una buena relación precio calidad y por eso es muy recomendable.
(La imagen es de https://gramho.com/explore-hashtag/laureanogomez)  

 

Unos días atrás tomé el Cavas de Crianza, Chardonnay, Cosecha 2018, de la bodega Clos de Chacras, sobre la que oportunamente (tras mi visita a la bodega), les comenté que en 1883 Bautista Gerónimo Gargantini oriundo de Suiza, llegó a la Argentina y con gran esfuerzo logró reunir un pequeño capital para asociarse a otro integrante de la comunidad suizo-italiana -Juan Giol- y ambos construyeron una bodega que creció rápidamente y que al poco tiempo se llamó Bodega Giol. Comenzaron -en 1899- a elaborar un vino, en pequeñas cantidades, con la marca CABEZA DE TORO, y a los pocos años se ubicó entre los mayores productores mundiales. En esa bodega se realizó el banquete en homenaje al presidente Figueroa Alcorta donde Gargantini y Giol fueron los anfitriones.
En 1909, Gargantini vendió su parte a su socio y compró una propiedad en Rivadavia (Mendoza), encomendando a su hijo, fundar allí  Bodegas y Viñedos Gargantini S.A. Este, llamado Bautista Gargantini, que vivía en Suiza, regresó a la Argentina a cumplir con el mandato de su padre y fundó la bodega y además construyó, para el bienestar de sus empleados, una sala de maternidad y otra de primeros auxilios, una escuela, una capilla, barrios para los trabajadores y centros deportivos, llegando a ser una de las principales Bodegas de Argentina. En 1948 contrató técnicos franceses para elaborar espumantes y así nació el “Champagne Garre”, el primero de la Argentina elaborado con el método champenoise y que alguna vez tomara mi padre, que siempre lo recordó como un espumoso seco y muy atractivo.
Bautista tenía otras dos bodegas, una en Vista Flores y otra en Chacras de Coria, que fue vendida, pero en 1987 fue recuperada por una de sus nietas y su marido, y en el año 2003 comenzaron a restaurarla convirtiéndose en la actual Bodega Clos de Chacras, que tiene un excelente restaurante, que deben visitar si van Mendoza, ya que está muy cerca de la capital (v. www.columnadelvino.com.ar  BODEGAS).
Este vino se elabora con uvas de Gualtallary, Tupungato, tiene una presentación sobria y discreta, pero que despierta atención por su candado en la etiqueta. En la copa se muestra de un color amarillo dorado y en nariz ofrece aromas a frutas de pulpa blanca, cítricos y notas de flores blancas. En boca tiene un ataque fresco debido a su buena acidez, y luego corre amable, manteniendo esa frescura, con buen cuerpo (14°), y con una ligera untuosidad en su final, que lo hace muy agradable. Muy bueno (Aprox. $ 300).

 

 

 

En esta cuarentena aprovecho para probar vinos que no conocía y entre ellos tomé el llamado La Chamiza, Polo Legend, Malbec, Cosecha 2018, que se elabora con uvas cultivadas en Tupungato, Valle de Uco y que resultó aceptablemente bueno en su gama de precio (Aprox. $ 300/350).
Tiene una presentación elegante y se exhibe en la copa con un color rojo rubí oscuro y algunos tonos violáceos. E nariz ofrece aromas a frutas rojas un toque de violetas y un dejo muy suave de vainilla debido a su paso (el 40 % del vino), por barricas de roble francés. En boca tiene una entrada amable y luego sigue con buen cuerpo pero con cierta frescura y taninos redondos, lo que lo hace agradable.

Acompañó muy bien a un par de pizzas. La que se ve en la imagen es de muzzarella, roquefort, tomate y aceitunas negras hechas por el suscripto.

Como señalé, con ese precio, obtenido directamente de la bodega (se puede comprar on line), brinda una muy buena relación precio calidad.  

 

 

EL VINO Y EL COLESTEROL

  

El Colesterol es una proteína necesaria para varios procesos, incluyendo la construcción de células y la producción de hormonas, pero es necesario señalar que, en principio, dos tipos: el llamado colesterol “bueno” o proteínas de alta densidad (HDL por sus siglas en inglés, high density lipoprotein), y el denominado  como por el colesterol “malo” o proteínas de baja densidad (LDL, low density lipoprotein). A pesar de los efectos positivos y necesidades, su exceso considerado una enfermedad denominada “hipercolesterolemia”. A esto hay que agregar que las proteínas de baja densidad o LDL, estimulan la acumulación de grasa en las paredes internas de las arterias que es lo que se llama “arterioesclerosis” que, en mayor o menor medida, sufrimos todos los seres humanos (algunos genéticamente más que otros), lo que lleva al riesgo de sufrir enfermedades vasculares, cardíacas y cerebrovasculares.

Otros lípidos son los “triglicéridos”, debiendo destacarse que, tras la ingesta, el cuerpo transforma las calorías no utilizada en triglicéridos, que constituyen una energía de reserva y de allí que la mayor parte de la grasa del cuerpo conforma por triglicéridos. Esta dolencia se llama “hipertrigliceridemia”.

Además del colesterol y los triglicéridos existen otros lípidos, pero normalmente sólo estos dos se toman en cuenta para medir o evaluar las condiciones de riesgo cardiovasculares. No obstante, paradójicamente, algunas personas -entre las que me incluyo- a pesar de tener muy bajo el LDL y bien alto el HDL, acumulan placas de ateroma en las arterias, entre las que se cuentan -en cuanto a riesgos- las coronarias (arterias que irrigan el corazón, primer causa de muerte en la población en general), las cerebrales, las de la aorta y la de los miembros inferiores. 

Aquí es oportuno decir que el contenido de colesterol en sangre, depende sólo en un parte (25 % o 30 %, según distintas opiniones), de la ingesta de alimentos grasos, el resto es producido por el organismo. Pero, sin perjuicio de ello, no parece lógico ingerir alimentos grasos que pueden subir los niveles (es como echar querosén a un incendio).

Aquí es oportuno señalar que, con algunas excepciones, como el licor de huevo, o los que se hacen con crema (Tía María; Amarula, Bailey, etc.), las bebidas alcohólicas no tienen y no producen colesterol o triglicéridos en forma directa, sino por vía del exceso de calorías que se “guardan” en el organismo (triglicéridos), o el exceso de grasas saturadas, que contribuyen a la elevación del colesterol.

Hay cuatro tipos de grasas en los alimentos:

Grasa monoinsaturada, que es beneficiosa, ya que varias investigaciones han demostrado que ayudan a subir el nivel del “colesterol bueno” (HDL) o bajar el nivel del “colesterol malo” (LDL). Se encuentran en paltas, almendras, aceite de oliva, de maní, de girasol, avellanas, etc.

Grasas poliinsaturada, que también es beneficiosa porque aporta sustancias que controlan la presión, coagulación sanguínea y el sistema inmune, algunas de ellas son los Omega. Se hallan en los pescados azules, aceite de maíz, soja, nueces, semillas de sésamo y de calabaza, etc.

Grasas saturadas, que son conocidas como “grasa animal” ya que son de origen animal, pero si bien son necesarias, su exceso puede subir el nivel del “colesterol malo” (LDL). Están en la manteca, carne, leche, crema de leche, quesos, fiambres, embutidos, etc.

Grasa Trans, son las que se producen cuando aceites líquidos se transforman en grasas sólidas, generalmente por la cocción y como producto de la manufacturación de alimentos. Varias investigaciones han demostrado que son el peor tipo de grasa, porque suben el LDL (“colesterol malo”) y bajan el HDL (“colesterol bueno”).

Por eso conviene -yo lo hago- leer la información nutricional que hay en los envases de los alimentos, para tratar de evitar los más dañinos y elegir los más saludables.

Esta esta explicación lleva a concluir que el vino y la gran mayoría de bebidas alcohólicas, no se hacen con componentes animales y por lo tanto no tienden a generar problemas de colesterol salvo, claro está, que si la ingesta de estas bebidas contribuye (como muchas veces lo hace), al aumento de peso, sobrepeso u obesidad, pueden afectar el nivel de colesterol y/o triglicéridos y por ende aumentar los factores de riesgo cardiovascular (placas de ateroma, hipertensión, hiperglucemia, etc.). Es importante destacar que el alcohol, que por vía de la fermentación se produce a partir del azúcar de las uvas (u otros vegetales que componen otras bebidas alcohólicas), vuelve a producir azúcar en el cuerpo, por lo que no es recomendable para los diabéticos.

Señalo una vez más (reiterando que no soy médico y que lo que sigue es una mera opinión personal), que un consumo moderado de alcohol (o vino), podría aportar algunos efectos beneficiosos al organismo. En lo que hace al colesterol, alguna investigación detalla que ha comprobado que el etanol aumenta la concentración de la Apolipoproteína A (apoA), que juega un papel importante en el metabolismo de los lípidos y es el principal componente proteico de las lipoproteínas de alta densidad (HDL, el colesterol "bueno"). Se dice que va a los tejidos y captura el exceso de colesterol, transportándolo de nuevo al hígado en dónde es reciclado para un posterior uso o excretado hacia la bilis. El transporte reverso de HDL es el único mecanismo por el cual las células pueden eliminar el exceso de colesterol. Por ello tiende a disminuir los niveles de LDL en sangre.  

 

NOTICIAS

  

Les conté de algunos altos puntajes de James Suckling, estos son otros: 

Nosotros Single Vineyard Nómade 2016, 99 puntos. Nuevamente Nosotros queda en el top 10 de vinos argentinos.

Nosotros Single Vineyard Nómade 2015, 97 puntos.

BenMarco Sin Límites Gualtallary Malbec 2019; 97.

BenMarco Expresivo 2018; 95.

Susana Balbo Signature Cabernet Sauvignon 2018, 94.

BenMarco Sin Límites Chardonnay 2019, 94

Susana Balbo Signature Barrel Fermented Chardonnay 2018, 93

 

Don Nicanor Single Vineyard Finca Villa Blanca Malbec 2016, obtuvo 94 puntos.

Don Nicanor Barrel Select Malbec 2018, 94.

Don Nicanor Malbec 2018, con 93.

 

Weinert, 93 puntos.

Cavas de Wienert, 91.

Carrascal Chardonnay 91. 

 

CORREO DE LECTORES

 

La misma amiga de siempre me criticó, nuevamente:
Alejo: Otra vez mujeres …
Ahora fue un veterano interesante.

  

Otro amigo me dijo:
Alejo: ahora a mi también me empezó a gustar la náutica …
Y claro …

 

Un ex restauranteur, apuntó:
Que tal queridos míos, cómo va la cuarentena ? Estuve leyendo algo de Freud y lo relacioné con tu cambio del buceo a la náutica, me permito hacerte una pregunta: ¿ no será que antes te gustaba ir abajo y ahora arriba ? Abrazo virtual sin distanciamiento !!
Son gustos momentáneos … 

 

Una muy conocida instructora de buceo, a la que le gusta el vino, me dijo:
Que buena la nota  de Aurora … Fue mi alumna del curso de nivel inicial porque necesitaba ser buceadora para su primer cruce del Atlántico en solitario. Si una hélice se enredaba ella debía bucear para poder seguir la travesía. Le regale todo su equipo de buceo y ella puso el logo de mi escuela en la popa del Shipping … recuerdos buenísimos! Gracias por mencionarla en tu boletín…
No era para menos … una travesía extraordinaria y, en mi caso, contada por el Dr. Omar Sánchez que la acompañó de aquí a Buzios y de Buzios hasta Puerto Nuevo.

 

 Los comentarios anteriores, pueden volver a leerse en www.columnadelvino.com.ar haciendo click en el buscador

 

La semana que viene estaré nuevamente con Uds.

Mientras tanto les deseo un feliz día del trabajador

 

ALEJO

 “El Añejo”