La Columna del Vino ®

AÑO XXIV – NUMERO 16    (05.05.24) 

 

Estimados lectores/seguidores: ¡¡¡ Ya vuelvo otra vez!!!

 

 

  

   

 

En estos días otoñales de lindos atardeceres…

 

qué mejor que un elegante blanco 

 

 

 

 

 

 

 

VINOS

  

 

 

Les habló varias veces de Arístides Wines , de Federico Sottano (su factotum), que hace más de veinte años produce buenos vinos y con etiquetas llamativas y que, en sus comienzos, el proyecto se desarrolló junto a su primo Hugo Baró (Enólogo).

Una de sus líneas relativamente recientes, pensada y creada por Fede Sottano, es el Desterrado que se abre en tres blend, de uvas tintas llamadas INICIO, CAMINO y DESTINO.

En esta oportunidad probé el Desterrado El Inicio Blend Nº 1, Cosecha 2019 , que es un corte de 70 % de malbec y 30 % de bonarda (ambas de Maipú), que pasa meses en barricas de doce roble francés (probablemente de 1ro y 2do uso)

Tiene una presentación elegante en una botella esbelta, y se luce en la copa con un color rojo oscuro con tonos violáceos y azules. En nariz brinda aromas de ambas cepas como ciruela, cerezas, frambuesas y sabores de especias y vainilla. En boca tiene cuerpo medio (13,7º), taninos densos y pulidos, notas frutadas y un final largo, intenso y equilibrado. Muy bueno. Caja de los tres blend a aproximadamente $ 45.000/50.000.  

 

 

 

 

El lunes 22 de abril, en plena convalecencia de mi operación, cumplió años mi esposa, por lo que el festejo iba ser muy pequeño, pero se acoplaron mi ex concuñado y la prima de mi esposa. Comimos una parrillada, con un tinto grueso pero, finalizamos con un vino más elegante: el Trapiche Medalla, Malbec Cosecha 2020, que nació como un hito o festejo, en 1983, al cumplirse los 100 años de la bodega. En un principio era un blend y ahora esta línea tiene cuatro etiquetas: El Blend de siempre, éste Malbec, un Cabernet Sauvignon y un Chardonnay.
Hice la salvación de un vino anterior grueso y robusto. No porque éste no lo sea, sino por la delicadeza que se desliza en todo su paso por el paladar.

En efecto, se trata de un vino hecho con uvas de Luján de Cuyo que pasa dieciocho meses en barricas de roble francés de primer uso, tiene 14,6º de alcohol y posee una acidez justa.

Su presentación clásica y elegante fue muy similar a través de los años. En la copa luce con un color rojo purpurado intenso con un tinte violáceo y exhibe buenas piernas. En nariz ofrece aromas a frutas rojas como ciruelas, cerezas y frambuesas, además de notas de vainilla, chocolate y suaves dejos ahumados, producto de su crianza. En boca es muy amable desde su ataque hasta su final, con buen cuerpo, pero con taninos redondos y dulzones lo hacen muy agradable, todo lo cual, con su acidez moderada, lo tornan muy interesante y elegante lo que lo hace un vino más que excelente (Aprox. $ 9000/10000, en la tienda on line de la bodega). 

 

 

 

Con la torta (era pequeña), de frutillas y crema pastelera, abrimos un ya clásico Montchenot Extra Brut.

Debo recordar que esta legendaria, tradicional y más que centenaria bodega lanzó, en 1966, esta marca como Chateau Montchenot, hoy Montchenot y en 1987 dispuso del primer espumoso de esta etiqueta, el Montchenot Nature. En el 2000 se elaboró ​​un extra brut y al año siguiente se produjo el Montchenot Brut Nature. Finalmente, en el marco de cierta renovación impulsada por los hermanos Carlos y Eduardo López Laurenz (la que aplaudo), se lanzó Montchenot Brut Nature Rosé.

En este caso (extra brut). se elabora con uvas chardonnay, semillón y pinot noir, mediante el método charmat lungo, que implica una crianza sobre lías (posterior a la toma de espuma), en el mismo tanque de fermentación para ganar más aromas y complejidad.

En la copa se muestra con un color amarillo con ligeros tonos dorados, y exhibe burbujas finas y persistentes que forman una corona cremosa.

En nariz deja percibir notas de frutas de pulpa blanca y ligeros platos de levaduras y pan tostado, así como toques de frutas secas. En boca es fresco pero a medida que avanza por el paladar se torna untuoso gracias al aporte del pinot noir y del semillón, que conforman una buena estructura. Su final es grato, de esos que invitan a tomar otra copa. En definitiva: excelente (Aprox. $ 7000/8000).

 

 

NANDO PARRADO: La Tragedia de los Andes

 

  

 

Fernando “Nando” Parrado , fue uno de los sobrevivientes de la Tragedia de los Andes, en la que perdió a su madre, a su hermana y a muchos compañeros de estudios y del equipo de Rugby (Old Christian). Y fue uno de los que caminó dos o tres días hasta que encontró a unos lugareños que lo ayudaron con el rescate de los sobrevivientes. 

Es autor del libro “Milagro en los Andes” y actualmente también se dedica a dar charlas sobre su experiencia y la manera en que continuó su vida después de la tragedia. Parrado está casado y tiene dos hijas, pero su vínculo con Mendoza (donde cayó el avión, en el Valle de las Lágrimas, a pocos kilómetros de la frontera con Chile), lo llevó a introducirse en el mundo de la vitivinicultura, mediante su emprendimiento. . . . . : VINOS NANDO PARRADO. 

 

 

 

Sus vinos son el FILA 9 MALBEC elaborado con uvas provenientes de El Peral, Tupungato, Mendoza (1150 msnm), sin madera. 

MONTE SELER MALBEC: Monte Seler es la montaña que Nando escaló para conseguir ayuda para el rescate de los sobrevivientes y que bautizó en honor a su padre, su gran motivación para seguir adelante. Sus uvas provienen de Gualtallary, Tupungato, Mendoza (1250 msnm). Su fermentación es en pilata de cemento, su crianza en barrica de roble francés de 225 litros de segundo uso. 

VIEJO SELER MALBEC - CABERNET FRANC, dedicado a Seler Parrado, el padre de Nando. Las uvas provienen de San Pablo, Tunuyán, Mendoza (1400 msnm). Su fermentación con levaduras nativas es llevada a cabo en huevos de hormigón entre 15 a 20 días, para luego tener una crianza en barrica de roble francés nueva durante 18 meses.

 

Todos llevan la mano del destacado enólogo Matías Michelini (ambos en la imagen).  

 

 

NOTICIAS

  

Me informan que el vino Sagrado El Pedernal, el top de Finca Las Moras y que ellos denominan como “una joya vinícola nacida en el prestigioso Valle de Pedernal” , ha recibido 95 puntos por parte de James Suckling, periodista norteamericano reconocido como uno de los críticos enológicos más influyentes a nivel mundial.
El enólogo de la bodega Germán Buk, compartió su entusiasmo diciendo: "Estamos orgullosos de recibir este reconocimiento por parte de James Suckling. Es un testimonio del compromiso de Finca Las Moras con la excelencia enológica y refleja el trabajo arduo y la pasión que dedicamos a cada botella de Sagrado de Pedernal. Este reconocimiento nos impulsa a seguir explorando los límites de la calidad ya continuar elevando el estándar de la industria vitivinícola argentina".
Recuerdo que Finca Las Moras: al pie de la Cordillera de Los Andes, en el Valle de Pedernal, nació como una bodega experimental, pero al poco tiempo alcanzó un bien merecido renombre con sus vinos Sagrado El Pedernal, Mora Negra, Gran Syrah, Demencial, Paz y Los Intocables, entre otros

(ver https://fincalasmoras.com/es/) 

He probado este vio varias veces y creo que su calificación de 95 puntos es austera, yo lo tomo como un vino soberbio.   

 

 

  

 

Como saben que soy buzo y amante de las actividades subacuáticas (salvo la caza submarina), me informó que la bodega FOSTER LORCA, ha lanzado un pack con dos vinos naturales, uno tradicional y otro que fue criado a membrillo metros de profundidad, en el Dique Potrerillos, a una temperatura constante de 12º centígrados.

Con esta nueva “prueba” cada vez son más quienes intentan darle una particularidad a la crianza, en este caso (como la mayoría), sin madera, pero con el silencio, la quietud, la baja luminosidad y baja temperatura de la profundidad.

Se trata de un blend de Cabernet Franc y Malbec, cosechado en el año 2022, y presentado en una caja de 2 botellas a $ 173.835, en:

 https://drinksify.io/product/detail/accfbc04-7bfb-4eb5-b3f0-356da0031562 

 

 

ALGUNOS MENSAJES DE LECTORES

 

Agradezco todos los saludos, buenos deseos y preocupaciones, recibidas por esta vía, Whatts App, Instagram y Facebook, pero destaco uno me llamó la atención ya que decía:

Fuerza, poeta enologico!!!
Me llamó la atención por la consideración de “poeta”… He escrito mucho en la segunda mitad de mi vida, de manera que “escritor” no me hubiera llamado la atención, pero poeta, parece querer decir que le pongo a mis comentarios un toque personal que hace agradable su lectura…
Bienvenida esta “calificación” que agradecí y vuelvo a agradecer. 

 

Un viejo amigo me dijo:
Alejo: muy interesante lo de las soleras, siempre había escuchado hablar sobre ellas pero no sabía concretamente qué era. Ahora veo dos o tres cosas: el vino se va mejorando con el tiempo; al mezclar las cosechas si una venta peor se “disimula” con las otras y, a la inversa, si una venta muy buena mejora a todas. Por otro lado, me imagino que no deben cambiar las barricas muy seguidas.
Cierto. 

 

Un joven lector señaló:
… había oído hablar de solera y pensé que era un lugar, sistema o técnica para asolear las uvas para hacerlas pasas o algo parecido o con un fin determinado.
Entonces mi nota ilustrativa tuvo éxito. 

 

Un buen tomador apuntó:
Clos de los Siete es un vinazo que tomo cada vez que voy a comer a un restaurante y lo tienen…
Yo también. 

 

Otro lector señaló:
Me gustó mucho la Mosquita Muerta que probé hace un tiempo, pero no se si era el que mencionás.
Todos son muy buenos en su gama. 

 

Los comentarios anteriores, pueden volver a leerse en www.columnadelvino.com.ar   haciendo clic en el buscador

Y muchos pueden verse en @alejo.martinez.araujo 

 

La semana estaré nuevamente con Uds. 

 

Alejo

“El Añejo”