Estimados lectores/seguidores:

 

 

  

 

Kate Moss

 

y su copa de champagne

 

 

 

 

 

 (Ver infra: Copas de Champán) 

 

VINOS

 

Clos Abanicos es un proyecto personal del Enólogo y Director Philippe Caraguel y Jean Étienne Beaune Presidente de la Bodega Atamisque, que pudo visitar nuevamente en diciembre. 

Los vinos de Clos Abanicos se elaboran sobre la base de parcelas seleccionadas del viñedo de San José, Tupungato (a 1300 metros de altura), zona en la que se encuentra la bodega y sus plantaciones y se hacen pocas botellas de cada una de las cuatro. . . . . . . . . .  etiquetas Chardonnay, Malbec, Cabernet Franc y un Blend, que se ilustran con distintas obras de arte. Se venden en cajas de madera de cuatro botellas (una de cada cepa).
Los vinos parten de parcelas de bajo rendimiento (unos 50 qq/Ha) y se fermentan y crían durante diez meses en barricas de roble francés de primer uso.
En esta oportunidad probé el Abanicos Chardonnay, Cosecha 2021, Terrior San José que además de su sofisticada presentación ilustrada por la artista plástica Cecilia Prato, tiene el nombre del vino escrito en forma perpendicular a la derecha. En la copa se luce con un color amarillo brillante con tonos dorados. En nariz propone aromas a frutas de pulpa blanca como peras, ananá, durazno blanco y un ligero déjo cítrico, además de notas de vainilla y miel. En boca tiene un ataque fresco debido a una acidez penetrante que ayuda a darle personalidad que se completa con un buen cuerpo para un blanco (13,5º), que llenan delicadamente el paladar, con elegancia y una prestación que lo erigen en un vino más. . . . . . . . . .  que excelente, con un recuerdo, largo y sabroso. La caja se vende, aproximadamente, a unos $ 90.000 (el chardo en solitario, unos $ 25.000), y por lo que he probado “los vale”. Es un chardonnay con una impronta más delicada de la que estamos acostumbrados (menos untuoso), pero con la aguda presencia de las sensaciones que produce. 

 

 

En el cumpleaños de un dilecto amigo inició la reunión (como suele hacerlo), ofreciéndonos un rosado y su elección fue el Amalaya Rosado de Corte, Malbec y Torrontés, Cosecha 2021, que elabora la bodega homónima que tuve oportunidad de visitar en septiembre y cuyo El enólogo Jorge Noguera y el agrónomo Javier Grané noS atendieron de manera excelente. Su presentación es muy llamativa, tanto por el color de la etiqueta que contrasta con el logo (amarillo), de la bodega como por su suave color rosado cereza, ligeramente asalmonado. En nariz, ofrece aromas a frutillas, ciruelas y cerezas, además de ciertos sabores de uva moscatel provenientes del torrontés. En boca es fresco debido a su buena acidez (pH 3,3 y total 6,4 g/l), con buen cuerpo para un rosado (13,5º), frutado, elegante y muy amable en su final. Muy bueno (Aprox. $ 3500/4000).

 

  

 

Tomé en estos días el Sophia Merlot Estate Reserve (que quiere decir que fue elaborado y embotellado en la bodega), Cosecha 2021.
Como les he contado, esta bodega -que tuve el gusto de visitar hace unos cuantos años- fue fundada en 1997, a instancias de Roberto Luka, con una acreditada trayectoria en el mundo del vino, bautizándola de ese modo en honor a la hija de su socio, Sophia y su propia hija Eugenia.
Originalmente su enólogo era Matías Michelini, época en que hice la visita y quien hace unos ocho años pasó a ser Wine Consultant, ya que comenzó a dedicarse a su propio emprendimiento. Lo sucedió Julia Halupczok la que, hace dos años pasó a ser asesora externa ocupando su lugar Joaquín Martín.
El vino tiene una presentación ya clásica de línea y se exhibe en la copa con un color rojo bordó intenso. En nariz ofrece aromas a frutos rojos maduros, suaves notas herbáceas, notas de pimiento rojo y un dejo de anís, además de ligeros toques y vainilla y tostados, producto de su paso durante doce meses en barricas de roble mayormente francés. En boca es amable en su entrada y luego corre con buen cuerpo, con taninos presentes pero redondos, lo que lo hace un vino muy agradable (Aprox. $ 6000/6500).

 

Con una ensalada de atún tomé un Callia Chardonnay, Cosecha 2023, elaborada por la bodega homónima, sita en Caucete, Valle de Tulum, San Juan y pertenece al grupo Salentein Family of Wines , de capitales holandeses, que cuenta también con otras dos bodegas: Pyros Wines, en San Juan, y Bodegas Salentein, en el Valle de Uco.
En el caso los viñedos están en ese valle ubicado a unos 600/700 metros de altura, con muy pocas precipitaciones anuales (90 mm), y si bien es un terror que se adapta a la viticultura, es oportuno destacar que esta cepa es tan versátil que se adapta a casi cualquier clima y lugar, tal como lo prueba el hecho de que en cualquier lugar del mundo “apto para la vitivinicultura” se produce chardonnay.
Tiene una presentación alegre y llamativa, que se distingue muy bien en una góndola y se muestra en la copa con un color amarillo con tonos dorados. En nariz ofrece aromas a frutas entre las que sobresalen la pera, la manzana verde y un dejo de plátano con un toque de vainilla debido a un pequeño contacto de cuatro meses en roble americano sin tostar, el 10 % del vino y el resto permanece. sobre lías otro tiempo igual.
El resultado en boca es un vino fresco, con buena acidez (pH 3,35 y total 7 g/l), cuerpo medio (12,5º), y con cierta complejidad y untuosidad, producto de ese proceso posterior a la vinificación (contacto con madera y lías). En definitiva muy bueno en su gama y es, probablemente, el vino que más me gusta de esta línea que, además, tiene una muy buena relación precio calidad (Aprox. $ 2000/2200). 

 

 

COPAS DE CHAMPÁN

  

Hace unos años, para conmemorar sus 25 años en la moda, el res taurante favorito de Kate Moss creó una copa modelada a imagen y semejanza de su “anatomía”. Sin embargo, cabe decir que por más bella que sean, la modelo y la copa, el producto tiene una impronta semejante a las “viejas” copas de champagne (v abajo a la izq.), que los ancianos hemos visto en la casa de nuestros padres y abuelos (algunos aún que las conservan, por ejemplo yo, aunque no las uso). 

Ante lo dicho más arriba, cabe recordar que el chismorreo preferido, en Francia en el Siglo XVIII, era que la cortesana conocida como Madame Pompadour o Madame du Pompadour (1721 - 1764), se veía a escondidas con el Rey Luis XV.
Por ello se sostuvo que, como muestra de devoción, el monarca ordenó realizar una copa para champagne aspecto de chato, boca ancha y poco cuerpo, supuestamente concebida a partir de un molde del seno de su amante, de quien tomaría su nombre: Copa Pompadour. . . . . . . , algunoOs la llaman Tazza. 

Se dice que esas fueron las primeras copas creadas específicamente para bebidas espumantes, de boca ancha y con forma de seno. Es una copa festiva, que permite construir castillo como si fuera de naipes y rellenarlas a modo de cascada (como se ha visto en algunas películas). Otros atribuyen ese modelo a Madame du Barry , otra amante del mismo Rey. También se dice que la primera copa, diseñada para beber champán, fue fabricada a finales del siglo XVIII por encargo de María Antonieta , esposa del Rey Luis XVI, tomando como modelo su seno izquierdo. Pero la cultura popular se encargó atribuir a la copa el nombre de Copa Pompadour. Por otra parte, hay quienes sostienen que ese tipo de copas fue mandada hacer por Napoleón Bonaparte, a imagen y semejanza las “tetas de Josefina” (como se suele decir), en alusión a los senos de su amante y luego esposa Josefina de Beauharnais. . . . . . . . . . (nacida como Marie Josèphe Rose Tascher de la Pageriee). La realidad parece situar el origen de este tipo de copas en 1663 por encargo del Duque de Buckingham a un artesano veneciano. 

No obstante, la Tazza, como se llamaba en un principio, no se popularizó hasta finales del siglo XIX, y se caracteriza por tener un diámetro grande y abierto, lo que permite beber con mayor rapidez, y al ser ligeramente cerrada por los bordes. se consigue que su contenido no se derrame a pesar de los vaivenes de la mano que la sostiene.

Lo cierto es que la concentración y expresividad aromática del champán no se refleja bien en estas copas ya que las notas aromáticas quedan aletargadas, más aún si tenemos en cuenta que esta copa, al tener poco cuerpo, se debe llenar en su totalidad con lo cual , por su gran superficie, no permite concentrar ni mantener los aromas y también tiene en su contra que mantiene mal el frío y la concentración de burbujas. 

De este modo, las conocidas y ya clásicas Copas Flauta han ganado totalmente la partida. Sin embargo, actualmente, luego de haber pasado el furor generalizado de estas últimas, se ha comenzado a preferir, para los espumosos, que requieren una acidez más integrada y armoniosa, las copas de forma bulbosa (más comunes para los blancos tranquilos). 

Se la denomina Copa Tulipa y para muchos expertos, es la mejor para degustar el champagne y captar todas sus expresiones. En esencia es una versión de la copa 'flauta', pero con curvas, o sea más ancha en el centro y más angosta en el extremo lo que permite respetar la temperatura, evitar que el carbónico se escape y hace que los aromas se concentren y perduren, para lograr una experiencia olfativa de mayor intensidad. 

Sobre el champagne Napoleón Bonaparte dijo: “En la victoria uno lo merece; en la derrota uno lo necesita".

  

 

ALGUNOS MENSAJES DE LECTORES

  

Un amigo me dijo:
Hola Alejo: Volví de vacaciones y observé a la niña con la “copa rara”. No importa, sigue publicado ese tipo de copas que son muy lindas.
DE ACUERDO.  

Una amiga, amante de los blancos, apuntó:
Qué lástima que no pusiste a Alec Baldwin tomando vino blanco, hubiera sido la combinación perfecta .
Bueno pero encontré una en la que estaba probando espumosos.  

Un buen tomador me contó:
Ya que nombrás de la Bodega Putruele, te cuento que he tomado varias veces los reserva y me parecieron siempre muy buenos y sobre todo accesibles…
Correcto, no tienen precios desmedidos.  

 

Los comentarios anteriores, pueden volver a leerse en www.columnadelvino.com.ar   haciendo clic en el buscador

Y muchos pueden verse en @alejo.martinez.araujo  

La semana que viene estará con Uds.

¡¡¡ Les deseo que tomen buenos vinos, blancos bien fríos, por el calor !!!

 

alejo

 “El Añejo”